¿Te cuento una historia triste?



Le decía a mis amigos antes de contarle alguna tragedia, no tan trágica...
Vuelvo a usar el mismo preámbulo, para las historias tristes, no tan tristes.

Quizá esta sí es más triste... 

Hoy con tres amigos fuimos al museo de la memoria, 

está en quinta normal.
Nos aventuramos por los pasillos y empezamos a ver fotografías y a leer,
mientras el "cuero de chancho" que decimos poseer nos abandonaba un poco.

A mí se me iba partiendo un poco el alma
mientras mi amiga estaba que lloraba...
Al JP lo llenaba la rabia...


Yo me perdí entre tanta lectura y vídeo,
después leí un tipo de apunte
de algún niño sobre el golpe militar
mientras veía un montón de faltas ortografía
la desazón
y esa sensación de no poder explicármelo
me embargaban
me dio pena,
mas pena que nada,
más que rabia
más que frustración
lisa y llanamente
me dio pena
me senté en una banca 
y pensé que había sido mala idea ir allá
que yo ya tenía conciencia
ya manejaba información
me había ido a romper el corazón
sin mucho sentido.


Me fui, y esperé a mis amigos en la entrada
No vi todo el Museo.


Mis amigos me dijeron que después el recorrido era más esperanzador
Y me lo perdí por huir...



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