"Le fabuleux detin d'Amélie Poulain"

.


"Son tiempos difíciles para los soñadores"



"Cuando un dedo apunta al cielo,
el tonto mira el dedo"




“ … Mi pequeña Amélie, usted no tiene los huesos de cristal,
podrá soportar los golpes de la vida.”



“-No, idiota. Está enamorada.
-Pero si no la conozco.
- Claro que la conoces.
Desde siempre, en tus sueños.”


"La suerte es como el tour de Francia,
lo esperas todo el año y luego pasa rápido;
las oportunidades hay que atraparlas deprisa,
sin dudar."



"...collignon cebollón!!"

Fe




Creo que hay muchas incógnitas en el universo; muchos por qué sin respuesta, sin sentidos flotando en el aire; Y alguno seres intentando darle sentido a todo, creencias que dejan las preguntas asombrosamente respondidas o delegadas a la fe, sólo confía no analices.

Nací en la parte del mundo donde la mayor parte de la gente es cristiana, donde un Dios único y todo poderoso rige el mundo, con amor y a ratos con severidad, donde un libro santo lo describe perdonador y castigador.

Creo que intenté dejar de creer en Dios en un tiempo en que el corazón se me rompió, mal momento supongo, porque el dolor era grande por una ilusión despedazada y por el padecimiento de dejar atrás aquello en que había sostenido mi vida, la fe.

Creo que el intento de ser atea, independiente, inteligente e individuo me duró un par de días; Decidí creer y me sume al gran grupo que busca a Dios; Creí encontrarlo en un grupo bíblico -por algo me habrá tocado nacer en este hemisferio, pensé- Creo que me gusto ese grupo de gente llena de reglas, de cantos y abrazos, sobrios pero efusivos, cristianos, creyentes; El problema no fue la gente, ni las reglas, ni los cantos, ni el largo viaje al “Templo”; Fue el enmarcar a Dios, el libro santo, el que el Señor fuera guerrero y pacificador, enjuiciador y perdonador… Que el resto del mundo, de las religiones, de los creyentes estuvieran equivocados y en la vida pagana, porque les tocó nacer al otro hemisferio del planeta y no importaba el amor que demostraban, la devoción o los sacrificios, estaban destinados al infierno si es que los cristianos no los evangelizaban…

Entonces desistí.

Pero Dios siguió ocupando un gran lugar en mi mente, y en mi corazón; Yo no sé cómo vivir sin esta “loca” idea de la fe, de creer en ese Ente superior, desconocido y familiar, amado y a ratos temido, comprendido y mayormente incomprendido.

Siguen las preguntas en el aire; la vida parece llena de sorpresas, de sinsentidos, de incógnitas, de misterios; Un día decidí creer en Dios quizá por conveniencia, porque me gusta saberme escuchada en las oraciones, o en los diálogos eternos de mi mente a ratos indomables; Porque me gusta que una sabiduría superior tenga la última palabra y tenga motivos para hacer o permitir hechos; Me gusta creer que un Ente que nos ama a todos, que nos cuida.

Quizá fue por conveniencia, porque me gusta vivir en un mundo regido por un algo misterioso y maravilloso, sueños e ilusiones dirán muchos, pero también es porque me parece más inverosímil que ese gran Ser no exista; Por que la idea del universo construido por una serie de sucesos aleatorios no me calza; porque el que el mundo se haya creado por más sucesos aleatorios no me calza; porque el que la vida se diera por otro montón de sucesos aleatorios tampoco me calza; Y principalmente, porque no me calza que la capacidad de sentir se haya creado solamente por una serie de sucesos aleatorios.

Y además están los milagros; Grandes milagros.

Gracias Señor.




---------------------------------------------------

Foto: http://anisypimienta.blogspot.com

-¿Quieres que se te repita el milagro?

-Mmmm… Más o menos, digamos que sí.

-¿Y tú crees que eso es posible?

-Todos los días amanece ¿No?

-Sí…






"Seamos realistas y hagamos lo imposible."



-Ernesto Che Guevara











PD: Digamos que tengo miedo...








Babel

Nube negra.

Esta semana ha sido complicada; Cansadora mejor dicho, estudio, estudio.

¡Presión!

Presión; Me siento como Atlas…

Sin tiempo y estoy aquí; En ves de estar durmiendo, completando el portafolio, o estudiando para las 4 pruebas de esta semana.

Me duele la mano de tanto hacer números o letras…

Un descanso…

No quiero ser máquina, ni por sólo algunos días.

De ves en cuando la vida se complica mucho…

Una ensalada en mi cabeza y mezcla de sensaciones; inhibiciones de sentimientos.

Enredos, abandono, actos, silencio, quietud, palabras…

A ratos las palabras engañan…

Sospecho que la maldición de la torre de Babel no fue sólo una diversidad de idiomas; sino de lo que se entiende; Al parecer el mensaje que se recibe, tiene mucho que ver con la “disposición” del receptor.

Quizá por algo, por ahora, el tiempo es escaso…

Ojalá… ojalá muchas cosas buenas sucedan…

Señor:

Ayúdame; Ayúdame de esa manera misteriosa y milagrosa que acostumbras.

Amén