Sobre el desastre
El cumpleaños inesperado
Es ahora la etapa de hacer ruido
Algunas cosas curiosas
Este Blog es un menjunje de escritos y un ayuda memoria.
En el día de la poesía
Un hombre caminando sobre el mar
Sobre su corazón
Camina cielo adentro
Sobrecogiendo al sol con su mirada.
Un hombre
Para quién todas las cosas
son parientes lejanos.
Nacido de la luz y de la sombra
Con solamente aparentar tristeza
Mueve a risa
A quién tenga el placer de mirarlo.
Perseguido por las aves y por las fieras
Y pensar
Que sólo en su mano izquierda
Han crecido cien robles,
Que para vivir un día de su vida
No hay Clepsidra inventada
Ni medida de tiempo.
Él con su corazón
Bajo los pies, sobre el agua,
Junta los cuatro puntos cardinales.
El amor
le pasó por los ojos
Como un vértigo
Ebrio de abejas, sin heredad
La muerte sólo sería muerte
Si encontrara su mano.
Qué solo el hombre
De pie, sobre el océano.
La alegría le teme
Como a un mal pensamiento
Y pensar que su frente es el muro
Donde podréis dibujar
Los más bellos grabados infantiles.
Así avanza
Paso a paso sobre el agua
Siempre despierto mientras el sueño
Vive en los ojos
Del resto del mundo.
Sin divisar jamás el horizonte:
su mirada de golfo perdido
su mano derecha de fuego.
Su boca
El alud que sepulta
con una sola de sus palabras.
Y qué solo
Va el hombre de espalda al sol
perseguido de niños y sueños
Engañador de cambios terrestres
Entre la muchedumbre de los peces.
Ah si encontrarais otros ojos
Con más lejanía
De inconclusa oscuridad.
Camina
Entre el canto de los peces
Sueltos como los hombres en su gran prisión
Inefable
como Dios cuando quiere ser hombre.
Distiende la pupila de brasa celeste
A la estrella antigua
En demanda de su halcón pez.
Oh panal de ojo ciego
Quiero caminar de pie
Contigo sobre el agua
Saludar la escama de gran pez
Ser solícita con la bruma
y penetrar la aleta oculta
que insinúa una mañana de mar.
Beber la leche que desparrama la ola
Cuando tu gran corazón
Quiebra la soledad...
Sordo es el corazón del hombre
Cuando camina de pie, sobre el océano.
Esa inclinación de contradecir
Los locos siempre me han amado.
a lo largo de párvulos
primaria
secundaria
universidad
los no queridos
se prendían
de mí.
los mancos
los epilépticos
los tartamudos
los tuertos,
cobardes
misántropos
asesinos
fenómenos
y ladrones.
en el trabajo y en
el ocio
siempre atraje
a los indeseables. me encontraban
y se prendían de mí. aún lo
hacen.
ahora en este vecindario
hay uno que me ha
encontrado.
él merodea
empujando un carrito de supermercado
lleno de basura:
latas abolladas, cintas de zapatos,
bolsas vacías de papas fritas,
envases de leche, periódicos, portaplumas…
"hey, cuate, cómo estás?"
me detengo y conversamos
un rato
luego me despido
pero él
me sigue.
paso las cantinas
y los burdeles…
"manténme informado,
cuate, manténme informado,
quiero saber qué pasa."
él es mi novedad.
nunca lo he visto
conversar
con nadie más.
el carrito traquetea
un momento
detrás de mí
entonces algo
cae.
él se detiene
para recogerlo.
entretanto yo
camino por
la puerta principal
del hotel verde de la esquina
cruzo a lo largo
del vestíbulo
y salgo por la puerta
trasera
hay un gato
enmierdándolo todo ahí dentro
absolutamente encantador,
me sonríe.
(Sospecho que pertenezco a ese grupo)
Esto de dejar "tranquilo" a Dios
Carta a Bukowski
(o no lo intentes, pelea)"...El problema principal del suicidio es la idea de que podría ser el comienzo de algo peor. Lo que él realmente necesitaba era una botella de cerveza helada, con la etiqueta un poco mojada y esas gotas frías tan hermosas sobre la superficie del vaso."
No lo intentes ¡Pelea!
Noche de rock y motos
(o el deschavetado rezo y su contexto)
El viernes fui a un bar donde grupos hacían tributos a bandas rockeras; Así que ahí estaba yo, con un par de amigas y un par de motoqueros amigos de una de mis amigas; Con Don Brewer, Jim Morrison, Jimmy Henry y Freddie Mercury desfilando enfrente; Yo mientras alucinaba, tomaba cerveza y de vez en cuando miraba hacia arriba, y me decía no tengo para que fumar mariguana para volar y sentir que el techo se llena de colores, y revivir el video de Freddy Mercury vestido de mujer… Genial.
Pero luego había que irse, y uno de los motoqueros vivía cerca, así que nos invitó a seguir el “carrete” en su casa; Yo tenía ganas de seguir, así que no puse objeción (además igual no tenía cómo irme para mi casa). Así que estábamos ahí, tres chicas, dos motoqueros; todos ebrios y con dos motos; Y yo fui la “premiada” para irme sin casco, y en la moto dónde íbamos tres, yo al medio, entre el motoquero, “el más pequeño” (así le dicen) y mi amiga.
Mientras íbamos recorriendo el camino, yo iba feliz de la vida extendiendo los brazos, gritando no recuerdo qué, y en un momento, extraño momento, entramos a un bajo nivel, y me acordé del lugar dónde Lady Di tuvo el accidente; Y pensé que nos podíamos estrellar, no me dio miedo, estaba algo ebria; Pero pensé que en caso de accidente podía quedar con alguna secuela, y me vi paralitica y postrada en alguna cama de un hospital; Y eso me asustaba más que la muerte. Y mientras abrazaba al motoquero en un extraño impulso de buscar algo de “seguridad”, recé, siempre lo hago, y le dije a Dios: “Bueno, sé que no soy la más creyente o devota, pero si existes, cuídanos… Si mañana la vida sigue y yo voy a hacer clases sin grandes percances, te dejo tranquilo por dos meses.” Luego me solté y extendí los brazos, mientras mi amiga gritaba atrás de mí.
Deschavetado, lo sé.
Al otro día fui a hacer clases sin grades percances, sólo llegué atrasada, como una buena parte de las veces.
No sé bien a qué me referí con dejar tranquilo a Dios; Pero supongo que tiene que ver con no quejarme; Así que aquí estoy intentando cumplir mi parte, porque quizá sí existe Dios, quizá sí le caigo bien de vez en cuando y me cuida cuando hago tonteras tan grandes como esta.
O quizá no, pero me gusta pensar que sí.
Espera
Saludo de Michelle Bachelet
Y sigue Bukowski con sus putas y el pájaro azul
Tengo insomnio, y pienso en Bukowski, en el pájaro azul, en ese poema que habla de cómo ser un gran escritor, en eso que dijo que sólo uno puede salvarse; Y pienso en que tengo que levantarme temprano y trabajar; Y sigue Bukowski con sus putas y el pájaro azul… y pienso en las cervezas, en que tengo como ganas de tomarme varias; Pero tengo esa regla de no tomar sola; Y sigo pensando en Bukowski, en que en realidad no sé mucho de él, que sus cuentos no me gustaron mucho, pero a ratos me gustaría ser parecida a él, y me imagino como hombre, uno pobre, andrajoso y que la poca plata que tiene se la gasta en cerveza y putas; las cerveza como sangre y las putas como placer, evidencia de lo “miserables” que podemos llegar a ser, y tiene algo que no sé qué es; Quizá es como retroceder, dar pasos hacia atrás, y todos dicen: “¡Ey! esa persona no está avanzando”, y uno sigue caminando hacia atrás, mientras todos murmuran, y uno quizá no sabe bien que chucha está haciendo y de pronto comienza a correr hacia delante y paf el salto, y de alguna forma se logra saltar la valla.
Imagínate Violeta
Tú quédate contigo
Viola volcánica...
Como ser un gran escritor
bellas mujeres,
y escribir unos pocos poemas de amor decentes
y no te preocupes por la edad
y los nuevos talentos.
Sólo toma más cerveza, más y más cerveza.
Anda al hipódromo por lo menos una vez
a la semana
y gana
si es posible.
aprender a ganar es difícil,
cualquier pendejo puede ser un buen perdedor.
y no olvides tu Brahms,
tu Bach y tu
cerveza.
no te exijas.
duerme hasta el mediodía.
evita las tarjetas de crédito
o pagar cualquier cosa en término.
acuérdate de que no hay un pedazo de culo
en este mundo que valga más de 50 dólares
(en 1977).
y si tienes capacidad de amar
ámate a ti mismo primero
pero siempre sé consciente de la posibilidad de
la total derrota
ya sea por buenas o malas razones.
un sabor temprano de la muerte no es necesariamente
una mala cosa.
quédate afuera de las iglesias y los bares y los museos
y como las arañas, sé
paciente,
el tiempo es la cruz de todos.
más
el exilio
la derrota
la traición
toda esa basura.
quédate con la cerveza,
la cerveza es continua sangre.
una amante continua.
agarra una buena máquina de escribir
y mientras los pasos van y vienen
más allá de tu ventana
dale duro a esa cosa,
dale duro.
haz de eso una pelea de peso pesado.
haz como el toro en la primer embestida.
y recuerda a los perros viejos,
que pelearon tan bien:
Hemingway, Celine, Dostoievski, Hamsun.
si crees que no se volvieron locos en habitaciones minúsculas
como te está pasando a ti ahora,
sin mujeres
sin comida
sin esperanza...
entonces no estás listo
toma más cerveza.
hay tiempo.
y si no hay,
igual.
Si uno pudiera...
...sueña, emborráchate
sueña, emborráchate.
Es el tiempo del frío: ama,
apresúrate. El viento de las horas
barre las calles, los caminos.
Los árboles esperan: tú no esperes,
Éste es el tiempo de vivir, el único.”
La vida
...pesa más la pasión.
¿Y si supiera mi destino?
Una vez Martín me dijo que no pensara tanto,
que por eso él quedó así;
Yo no creo que él este mal.
El insomnio es un mal
que me persigue;
Y algunos recuerdos…
Esta noche
me repito
como alcohólica en rehabilitación
ya fue la última vez,
ahora aléjate
pero los malos hábitos
son eso
hábitos.
Y me dan ganas
de recaer…
¿Qué es la vida sin pasión?
Esta noche concluí
que en la vida
la felicidad no es el último fin
pesa más la pasión.
El destino en una moneda
2 de marzo
Hoy desperté con la extraña sensación de que todo saldría bien; Y sentí eso que se siente cuando caminas por la orilla de la playa, y estuve frente al computador maravillándome con lo que se puede hacer con un editor.
Luego comí y traté de ponerme en paz con los “míos”, o con ese ser que me dio el ser, pero no resultó, nunca resulta. Pero no me desalenté, caminé; Y visité uno de mis lugares favoritos, aún cuando tengo que andar más de una hora en micro; La Biblioteca de Santiago tiene su encanto, es fresquita como iglesia. Saqué un libro que ya leí y otro que habla de mentes…
Luego cine y conversa; Vimos el rito; Es curioso pero últimamente lo que veo o leo me instiga a creer en el destino… Y me acuerdo del viernes, y les digo a mis amigas que quizá si existe el destino, les cuento que el viernes tenía invitaciones a dos “carretes”, paso así, les digo:
“Se suponía que el viernes iría donde la Tanya, pero no me llamó ni nada para coordinar, así que pensé que había funado, así que me fui a la casa de la Naty, iríamos a otro carrete, pero en el camino me llamó una amiga del carrete de la Tanya y supe que la cosa iba, y no conteste, para pensar y elegir mi destino, y en un acto que muestra mi dudosa salud mental y que se lo atribuí a la falta de cerveza, llamé a la Naty contándole mi dilema y ella no me ayudó mucho, era mi decisión, he hice lo que suelo hacer cuando no sé qué chucha hacer, lancé una moneda y le imploré a dios ayuda (sé que es deschavetado), salió que fuera donde la Tanya, pero mostrando mis enredos mentales, me dije, toma una decisión tú misma (ahí una de mis amigas interfiere y actúa de mí diciendo: Clo toma una decisión tú misma) (y pensé que era la lección del día), y decidí ir donde la Naty, básicamente porque me cae mejor. Llamé a mi otra amiga, valientemente, para decirle que no iba al carrete, y comenzó a decir cosas sin sentido, preguntándole a alguien que no era yo si contaba o no, que esta era una historia de aventuras, le dije que estaba hablando por celular, que me contara rápido, y se me acabó la plata, pensé que quizá ya mi amiga estaba ebria, supuse que divagaba y me fui a la casa de la Naty. Mientras oíamos al de “The Police” en viña y observaba cómo mi amiga se planchaba el pelo, llamó mi amiga (la otra, no la Naty, a ella la tenía enfrente, maniobrando un objeto caliente), me dijo que habían ido hasta mi casa a buscarme, qué dónde estaba, les digo que donde otra amiga, me pregunta qué dónde, que me quieren ir a ver. Les digo y llegaron allá. A mí me dio como pena que fueran hasta mi casa en micro, de noche, porque hasta a mí me da susto hacer eso (gajes de vivir en la periferia), así que terminé yendo al carrete que la moneda me había dicho… Era mi destino”.
Tu destino en una moneda, dice mi amiga.
Llego a mi casa y pienso que hoy no busqué trabajo, que quiero hacer clases, quiero trabajar de profe….
Llego a mi casa, que no es mi casa, y pienso que quizá ya me toca hacerme mujer (como diría mi hermana).
La belleza hecha arte
Por ahora
Se acabó el trabajo de verano; Y pienso en las deudas que acechan, como lobos en camada. Mientras la casa se me está viniendo encima y no me reconozco, ni en algunos actos, ni en algunas palabras… dichas o escritas a algún fantasma o persona.
Sospecho que esta noche algo horrible pasará; Quizá debería huir, gastarme el último sueldo en irme a la playa y tenderme en la arena hasta que el mundo mejore por sí mismo... Y la voz de mi hermana me da vueltas en la cabeza: “Estás en los minutos de descuentos, te haz sacado la chucha tanto tiempo, cuando termines la U vas a ganar más plata que todos nosotros juntos y te podrás mandar a cambiar donde quieras, vas a tener el mundo a tus pies”.
Y yo pienso que no será tan así, que se me ocurrió estudiar pedagogía y los sueldos no son tan buenos. Pero la plata no es tan importante, quizá simplemente yo no sé vivir; Quizá el peso de no poseer familia me persiga para siempre, quizá el no poseer red de seguridad me persiga para siempre; Quizá los malos recuerdos me persigan; quizá hacer clases no me guste tanto como creo y los 45 seres que tenga enfrente serán mis enemigos campales…
Quizá tanto esfuerzo no vale la pena.
¿Qué se hace en el instante de calma cuando se ve venir la tormenta?
Me ha pasado antes y siempre he mostrado ser mala estratega.
Supongo que no huiré, porque tengo un sueño, que aunque no sé si me hará feliz, es mi sueño desde la infancia; Y quizá la Tanya tiene razón y Dios sí existe, y tanto drama pasa para valorar más los logros, y ya vendrán tiempos mejores en que los frutos se cosechen; Es la esperanza, el estado de espera… (palabras…)
Por ahora envidio el optimismo y la fe de mi amiga.
Por ahora pienso que el año se viene feo, y me digo, me repito, que se vive un día a la vez; y pierden fuerzas los días que aún no vivo y me ahogan, pero también pierde fuerza el camino ya realizado; Quizá no vale la pena...
(todo tiene un pro y un contra, el asunto es cuál pesa más)
Por ahora está el miedo.
Por ahora está el dolor, que te provoca quien por cultura y sangre debería protegerte (y sólo por eso duele más)
Por ahora está el cansancio y la evocación de tardes frente al mar cuando la paz entra a los pulmones y gobierna el alma.
(Foto de El Tabo, que me recuerda al terremoto, paradógicamente)