Frente a mi casa
(que en realidad no es mi casa)
hay una plaza;
a veces, cuando llego
(lo suficientemente temprano)
 veo gente sentada en sus bancas
o en los pastos
he infiero que en realidad no viven en el pasaje
porque andan en bicicleta o con bolsos
y pienso que yo nunca he pisado esa plaza,
nunca me he sentado en sus bancas…
quizá a varios de los residentes le sucede lo mismo.
Curioso esto de no disfrutar justo lo que está en frente.

No hay comentarios.: