Alguna vez escuche que los comienzos son terribles o era ¿Temibles? Supongo que es temible, tiene más lógica y es que los comienzos no son malos, al contrario dirán muchos.
Yo creo que son difíciles y es que a las personas nos cargan los cambios, por más que gritemos: ¡Estoy aburrido! ¡Odio la rutina! Cuando el tiempo nos golpea y nos pone en los inicios de un nuevo camino deseamos con todo el alma estar donde estábamos antes, en la seguridad de lo ya conocido, re conocido y vivido, re vivido.
“Los comienzos son temibles y los finales tristes, en la vida, como en casi todo, lo mejor está en el medio…” Y hay que puro ver un churrasco palta para darse cuenta que es verdad.
Señor lector creo que los comienzos son difíciles, temibles como dice aquello que escuche en alguna película a la que le busque la moraleja, como en casi todo lo que veo o vivo. Pero creo que con los años la tarea se nos va haciendo más difícil, ya no sólo se trata de construir, sino de reconstruir, de volver a empezar, echando todo lo vivido a un lado, recosiéndose las heridas que ya llevan harto tiempo abiertas y seguir para adelante, y válgame que cuesta eso de dejar lo re contra vivido y volver a empezar, y es que en el paso de desechar ese algo y adoptar otro nos podemos quedar sin nada y ya le agarramos cariño a lo que teníamos (riesgosa la misión).
Pero los invito a luchar… Los comienzos tienen un que sé yo, aún no sabemos como va a resultar todo, y cuando ya el “terror” del primer paso se pasa viene la esperanza, esa palabra que impide que la hagamos de caminases contra el mundo y nuestra tripas se muestren a vista y paciencia de los transeúntes…
Y es que esas ganas de hacerla de caminase, no es por puro complejo suicida, sino por el contrario, es por amor a la raza humana y esa rabia que se agarra contra la vida cuando por más que le haces empeño pareces maldita y todo te sale mal, el que te arriesgues no asegura la victoria; entonces te enojas y le hechas la culpa al mundo, ese ente bajo tus pies a veces diabólico que tanto mal te hace; “A ver si cayéndole encima deja de jugar con los humanos y se calma un tantito”
En fin, ustedes se preguntaran porque no la hago de caminase contra el mundo y muero por alguna causa justa, y por el contrario empiezo a hablar de los comienzos, como incitándolos a comenzar, recomenzar; pues no lo sé con exactitud, debe ser por pura locura y la incógnita que encierran las palabras “Esperanza”, “Fe”, “Confianza”, "esfuerzo" y principalmente “Amor”.
Más que mal aún se disfrutan los helados de chocolate, los paseos con los amigos y la risa de los seres que amamos y válgame que se siente rico, cuando después de una lucha bien luchá, llegas a tu casa con el corazón rebosante y la certeza que el mundo encierra muchos secretos, muchos placeres, mucho cariño.
4 comentarios:
Buen texto.
Me gusto eso de los comienzos...osea retrata la realidad.
Es como los discursos pa los amigos, el primero cuesta, los demás salen solos.
Buen blog!
Saludos y nos estamos leyendo!
Mich quién hubiera dicho que un churrasco palta serviría para hacer reflexiones sobre la vida ;)
Realmente, cuesta cambiar. Pero a veces simplemente hay que hacerlo.
Te estoy leyendo, luego te haré un link, saludos!
PS: no puedo comer azúcar porque tengo resistencia a la insulina, cuando como azúcar me da migraña porque me aumenta la presión osmótica en el encéfalo y la insulina blablabla... una explicación enredada; y además me puede apurar la diabetes II.
Londo comienzo.
Gracias Vian; Me recordó la entrada =)
Fue lindo leerla.
(Tengo una manía con los comienzos, también con los comienzos de los blog)
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