Ingenierías y vocación.

Dentro de las “reuniones sociales” que he tenido, donde de vez en cuando establezco un dialogo con algún amigo de un amigo o simplemente un desconocido, se ha repetido el hecho, o ha sido mi observación, que aquellos proyectos de ingenieros suelen ser medio egocéntricos, y con cierto complejo de superioridad; no sé bien por qué, pero en una gran mayoría de las veces me terminan descalificando, con comentarios algo así como: Yo creo que mis matemáticas son más complicadas que las tuyas… o que ellos van a ganar más dinero con menos esfuerzo… o que su carrera es inmensamente más complicada que la mía, que simplemente elegir estudiar una ingeniería es súper mega buena decisión y que estudiar pedagogía es medio idiota, que por poco menos estoy estudiando para “ignorante”; digamos que me defiendo, o me defienden de vez en cuando… (Argumentos de defensa que por ahora no relataré).

El asunto, es que hace unas semanas, olvidando mi prejuicio sobre los proyectos de ingenieros, me fui a la USACH a “relacionarme” con aquellos “objetos de mi prejuicio”; en realidad no iba con una idea muy clara de que hacer, quizá a embriagarme un poco, por lo que se me olvido que siempre terminan atacando “mis matemáticas” o el sueldo de un profesor… Pero como suele ser la vida de innovadora, hablamos hasta de la inmortalidad del cangrejo, menos de las matemáticas. Por lo que me encontré con varios ejemplos de proyectos de ingenieros que no eran ni egocéntricos, ni hablaron a la primera oportunidad de las fianzas, ni tenían complejo de superioridad; no a primera vista al menos (quizá sí de don Juan o protagonista de película gringa fiestera)

Así que frente a mi nueva “relación” con quienes estudian aquella carrera, me tiré en el piso de mi pieza y me puse a pensar que sería de mí si hubiese estudiado alguna ingeniería; Supongo que sería parecido, hartas horas de estudio, el masivo éxodo de compañeros expulsados de la U o que se cambian de carrera por ser muy fea, reprobación de ramos varios, rara vez egresar en el tiempo estipulado, etc. pero con el beneficio de que estudiaría un algo más además de puros “números” (en el área científica al menos), lo cual sería bastante entretenido y el sueldo sería bastante más “jugoso” que el de una profesora; Y sin polémicas varias como violencia en la sala de clases, calidad de la educación, LGE, etc.

Entonces, frente a mi duda existencial, y mis ganas a veces de poder retroceder el tiempo y haber elegido algo en que con mi sueldo si tuviera la esperanza de comprarle una linda casa a mi madre y una linda casa para mi, en un lugar mejor que en el que vivimos, con independencia domiciliaria, y ser mejor mirada en los círculos sociales, la idea de estudiar alguna ingeniería se me hizo inmensamente atractiva y algo parecido a la frustración llego a mi ser.

Pero como la vida de ves en cuando si se parece a los libros y llega a ser mágica, hizo que me atreviera ir a hacer una clase particular, a un niño de octavo año y francamente termine maravillada. Yo no sé si usted ha sentido esa sensación de satisfacción, que como que le agarra el cuerpo y le hace una ligera cosquilla en la panza y se siente algo así como feliz, casi brillando, resplandeciente... Satisfecho. Pues así me devolví de mi clase, contenta y con 5 mil pesos en bolsillo, lo cual jamás se parecerá a un sueldo de ingeniero, pero sirve. Así que de vuelta en mi hogar, deje de soñar con tener un sueldo monumental, que me podría comprar dos casa, un auto y demás; Y me comencé a hacer a la idea que me tendré que endeudar con un crédito hipotecario, llevar a toda mi familia a ese hogar y vivir con ellos hasta que la vida de alguna vuelta… Yendo a trabajar en micro, sin independencia domiciliaria, con un presupuesto apretado, sintiéndome satisfecha, casi feliz, casi resplandeciente, con lo que hago para vivir…

Eso es vocación al parecer.


2 comentarios:

Natho47 dijo...

Nunca es bueno generalizar,de todo hay en la viña del señor

rdp dijo...

Yo ya supe cómo sería si estudiara civil y de la peor manera... admiro a aquellos cubitos que lo eligieron porque era lo que les gustaba y porque rayan la papa con la carrera, pero a los otros que estudian para tener su sillón de gerente, well fuck off.

Elegí mi actual carrera porque supuestamente tendría estabilidad laboral y sueldos medio-altos (en el caso que realmente la biotecnología fuese como la computación al siglo pasado) pero ahora estoy cachando que tal vez ni siquiera consiga ejercer dadas mis malas notas y el mínimo mercado nacional; seguro tendré que sacar ramos de pedagogía o algo así, y me carga la idea. Ojalá pueda trabajar en lo mío alguna vez.