El peda retomado...

Al peda lo desalojaron el domingo; así que yo me imagine en clases esta semana. Pero resulta que ayer, cuando pensaba que asistiría a una asamblea, no me dejaron entrar a la U; como es de extraña la vida, resulta que el ingreso a los “alumnos” estaba vetado. Así que me quede esperando afuera; que me llegara la iluminación o que al dirigente de mate se le ocurriera agruparnos en un lado de la vereda he improvisara una asamblea.

Resulta que nada de eso paso y de repente empecé a escuchar el grito de la U, luego más gritos amorfos y finalmente el “¡Por la construcción!!!” Así que presencié como una turba de mis compañeros, aprovechando la puerta de las obras de la biblioteca, ingresaban “ilegalmente” al recinto donde estudian y gracias al sistema pagan por estar ahí.

Mire; Cuando la gran mayoría estaba adentro y la euforia inicial de la turba se estaba controlando, entre yo; Mate improvisaba una asamblea, donde comenzaron a repetir todo aquello que han hablado estos días, para informar a la gente que ayer se apareció; así que me fui, de aburrida, de friolenta y de miedo a ser detenida y que me culpen por todo lo que se le ocurra a alguna anónima persona, que va desde pintas las dependencias a tener ácidos en los laboratorios de química.

Hoy me levante medianamente temprano y devuelta a la U; al llegar comprobé mis sospechas y los rumores de ayer; El peda sigue tomado; o medianamente al menos, así que de vuelta a mostrar la credencial para ingresar y estar bajo la “sospecha” de que quizá nos desalojen.

Presencie una asamblea general; bastante folclórica; con perros interrumpiendo; gente alegando contra la toma; gente alegando en contra de la gente que alega en contra de la toma; gente alegando por enojo; gente alegando contra el recto, el capitalismo, los medios de prensa, la gente que no participa, etc. Paciencia, harta paciencia y tiempo. Luego estudiamos el comunicado que le pasarían al rector.

Luego me vine a mi casa; aunque me hubiese gustado quedarme; se suponía que irían a la rectoría (extrañamente el rector estaba ahí), a dejarle el comunicado y pedirle “civilizadamente” que el y los funcionarios abandonaran las dependencias de la U. No me quede por que ninguna persona conocida lo haría y supuse que tendría que esperar mucho para cuando el comunicado estuviese listo, mi estómago estaba alegando y la sensación térmica no era muy agradable; Además, a pesar de todo, y aunque no me guste mucho, a ratos el ambiente “político, rebelde y policíaco” del peda me da desconfianza y medio asusta.

Veamos que pasa…

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